
La fundación de
Antioquia es un evento histórico que marcó el comienzo de una nueva era en la
región colombiana. Fue un proceso
liderado por figuras como Pedrarias
Dávila, Vasco Núñez de Balboa, Alonso de Ojeda y más notablemente, por Jorge
Robledo que en 1541 llegó al Valle de Aburrá y junto con el cacique Nutibara, estableció lo
que hoy conocemos como Antioquia. Es así
que dentro de los primeros españoles que
llegaron a lo que hoy es Antioquia serían las de Rodrigo de Bastidas, Juan de la
Cosa y Vasco Núñez de Balboa, quienes en
1500 y 1501 recorrieron la costa Caribe
desde el cabo de la Vela hasta el golfo de Urabá, y se establecieron en este
último punto por algún tiempo; Alonso de
Ojeda pisaría estas tierras luego del segundo viaje que hizo Cristóbal
Colón, como navegante, gobernador y
conquistador español; y posteriormente
dirigió dos expediciones marítimas por las costas caribeñas que luego serían Colombia, Guyana, Trinidad,
Tobago, Curazao, Aruba y Venezuela a la que llamó así por los recuerdos que tenía de
Venecia, y fundó San Sebastián de Urabá, para después de muchas desventuras terminar enfermo, pobre, cojo por la vieja
herida que le hicieron los nativos con una flecha, decepcionado, pero imbuido
por su mística religiosa, murió a principios de 1.516
en el convento franciscano de Santo Domingo, en La Española; cabe destacar que
dicho poblado apenas duraría 6 meses ,debido
a la quema y destrucción que hicieron
los indígenas, quienes además de usar
flechas envenenadas, se opusieron fieramente a la conquista con sus mismas
vidas. Luego llegaría Vasco Núñez Balboa mediante artilugios en un barril escondido como polizón en uno de los barcos
que comandaba Martín Fernández de Enciso, rescatando a la malograda expedición
de Ojeda, y fundó junto con Vasco Núñez
de Balboa y al frente de donde estuvo el
anterior poblado, en el mismo Golfo del Darién, crearían en 1.510 a Santa María de la Antigua del Darién (la Virgen de la Antigua era venerada en Sevilla y en Logroño, tierra natal de la familia Enciso, en especial en
Arnedo, en cuya iglesia existe un altar con su escudo, una S sobre campo de
gules), y aunque no fundó ningún poblado antioqueño, junto con Martín Fernández de Enciso, ciudad
que sería la capital de la Gobernación de Castilla de Oro hasta 1.520 que
comprendía el territorio entre el Golfo de Urabá y Veragua;
entonces Panamá, fue dividida en dos en
1537 con la creación de la Veragua Real y del Ducado de Veragua. La parte
oriental de Castilla de Oro pasó a
ser conocida como el Reino de Tierra
Firme o Panamá, especialmente a
partir de la creación de la Real
Audiencia de Panamá en 1.538. En 1560, la Provincia de Veragua, creada
durante el reinado de Felipe II de España, fue agregada a esta jurisdicción. Castilla de Oro era el nombre dado a la parte occidental del reino
de Tierra Firme, que hoy es el territorio de Colombia y Panamá. En 1508, el
Rey Fernando el Católico ordenó dividir el territorio continental entre el Cabo de la Vela y el Cabo Gracias a Dios en dos entidades. En 1513, al frente de 190 españoles y 810
indígenas, Balboa se dirigió al
istmo de Panamá, tras una penosa marcha, los 67 sobrevivientes de la comitiva
vislumbraron desde las alturas el Mar
del Sur, que luego recibió el nombre de Océano Pacífico. Fue sustituido como gobernador de Castilla de Oro
por Pedrarias Dávila, que le envió a descubrir los tesoros de la diosa Dabaybe, y luego de su fracaso fue nombrado por
Pedrarias en 1.515 Adelantado de la Mar del Sur, y más tarde condenado por él mismo, y aupado por Franciso Pizarro el futuro conquistador de Perú, por crímenes
imaginarios , acusado de la muerte de Diego de Nicuesa el explorador español. En su primera expedición americana acompañó a Alonso de Ojeda adonde crearon dos
nuevas gobernaciones en las tierras comprendidas entre los Cabos de Vela (Venezuela) y el Cabo
de Gracias a Dios (cabo situado entre Honduras y Nicaragua), y luego
condenado y decapitado en Acla en enero 15 de 1.519 bajo las órdenes del mismo Pedrarias, y que hoy se le recuerda por el homenaje
póstumo hecho con el cráter lunar denominado por su mismo nombre.
El mariscal Jorge Robledo, militar y conquistador
español, fundó la ciudad de Antioquia el 4 de diciembre de 1541 en el valle de
Ebéjico, ubicado donde hoy está la vereda Santa Águeda, de Peque. Sin embargo, el 7 de
septiembre de 1.542, Juan de Cabrera trasladó la ciudad al Valle de Nori, al
occidente del río Cauca. También estuvo al mando de una expedición en
agosto de 1.541 que vio por primera vez
el valle donde hoy se asienta Medellín, en busca de tierras y riquezas de oro, fundando a su vez varias localidades, entre ellas las más
importantes fueron: Antioquia en 1541 y Santa Fe en 1546. Este enfrentamiento
tuvo sus altibajos, pues Robledo veía por momentos sus errores y pedía la paz;
no obstante, Belalcázar arremetió contra este, y en 1.546 lo condenó a muerte, siendo decapitado el 5 de
octubre junto a sus ayudantes de campo Hernán Rodríguez de Souza, Baltazar de
Ledesma y Juan Márquez Sanabria. Por estas razones Belalcázar fue enjuiciado in absentia por
este crimen, hallado culpable y condenado a muerte por los asesinados, por malos tratos cometidos contra los indígenas y
por participar en las luchas acaecidas
entre los conquistadores, aunque murió en Cartagena de Indias, antes de
emprender el viaje de vuelta a a España para apelar la decisión del tribunal.
Antioquia, conocida como la "Montaña de Oro",
es una región rica en historia y recursos naturales desde tiempos
prehispánicos, la minería ha sido una actividad económica fundamental,
especialmente en la extracción de oro en lugares como Buriticá. Los depósitos
auríferos de esta área se encuentran en
filones montañosos a altitudes entre
1.600 y 1.700 metros sobre el nivel del mar, por lo cual definió la vocación
económica de sus habitantes y ha contribuido al desarrollo de la región.
La palabra "Antioquia" tiene un origen que se remonta a la antigua ciudad de
Antioquía en la región de Anatolia, actual Turquía. Esta ciudad fue fundada
alrededor del año 300 a.C. por Seleuco I Nicátor, un general de Alejandro
Magno, y nombrada en honor a su padre, Antíoco de Macedonia y que posteriormente se convertiría en la provincia
romana de Siria. Allí surgirían los
primeros cristianos de origen no judío. En el contexto colombiano, el nombre fue dado a la región por
el conquistador español Jorge Robledo en 1541, cuando fundó la ciudad de
Antiochia, que más tarde se conocería como Santa Fe de Antioquia. Este momento
crucial en la historia no solo significaría
la creación de un nuevo asentamiento, sino también el inicio de una mezcla
cultural entre los indígenas y los españoles, que darían forma a la identidad
única de la región. La fundación de Antioquia simboliza la resistencia, la
tenacidad y la riqueza cultural que caracterizan al departamento y a su gente.
A lo largo de los años, Antioquia ha crecido y se ha transformado en un centro
de innovación y desarrollo, manteniendo siempre su herencia y tradiciones. La
historia de su fundación es un testimonio de la determinación y el espíritu de
colaboración que han impulsado a la región hacia adelante.